Fuente: CNN

El Congreso de Estados Unidos acordó extender el presupuesto del Gobierno, evitando así un cierre de la Administración un día antes de que expiraran los fondos que le permiten seguir funcionando.

La resolución de continuidad aprobada fue hasta el 23 de diciembre, y da algo de tiempo a la negociación de un proyecto de ley, para financiar el año fiscal 2023, que va desde el 1 de octubre de 2022 al 30 de septiembre del año siguiente.

Un acuerdo bipartidista ha resultado difícil de asegurar en medio del desacuerdo entre las dos partes sobre cuánto dinero se debe gastar en prioridades nacionales no relacionadas con la defensa.

Los republicanos critican el reciente gasto interno de los demócratas y argumentan que las medidas que los demócratas han aprobado mientras tenían el control de ambas cámaras del Congreso, como un proyecto de ley de alivio de la pandemia de $ 1.9 billones y un proyecto de ley climático y de atención médica radical, son un desperdicio y empeorarán la inflación.

Los demócratas responden diciendo que esas medidas eran necesarias para ayudar al país a recuperarse del impacto devastador de la pandemia, así como para abordar otras prioridades críticas. Los demócratas dicen que el dinero para responder a COVID, la atención médica y el clima no debería significar que debería haber menos dinero el próximo año para operaciones gubernamentales y gastos domésticos que no sean de defensa.

Algunos legisladores republicanos han afirmado ya que prefieren seguir posponiendo el debate sobre el nuevo proyecto de ley hasta el próximo año, cuando su grupo recupere en enero el control de la Cámara de Representantes, con la esperanza de que esto les dé mayor poder de negociación para forzar recortes.